27/12/05

La última cigüeña



Félix Urabayen La última cigüeña. Edición, introducción y notas de Manuel Simón Viola. Colección Rescate. Editora Regional de Extremadura, 2005

La Editora Regional de Extremadura ha editado en su colección Rescate la novela La última cigüeña, que publicó en 1921 Félix Urabayen, un escritor navarro afincado en Toledo y que estuvo destinado dos años y medio en Badajoz como profesor de la escuela normal y donde Arquero le imprimió su primera novela, Toledo. Piedad.

Rezagado del 98, del que sin embargo renegaba, y considerado en su tiempo como uno de los mejores prosistas españoles contemporáneos, Félix Urabayen hoy es prácticamente un autor desconocido. Uno de esos escritores que gozaron de cierta popularidad durante los años 20 y 30 pero que por su militancia política fueron prácticamente condenados al olvido tras la Guerra Civil y vieron prohibidas sus obras por la censura.

Con introducción y notas de Manuel Simón Viola, La última cigüeña está ambientada en el valle navarro del Roncal y en el "corredor del Guadiana", en las tierras de la baja Extremadura, una Extremadura descrita desde una postura a la vez crítica y afable, entre la admiración y lo testimonial.

Técnicamente, La última cigüeña es una novela escrita con limpieza, pero con cierto anacronismo que la hace oscilar también entre lo descriptivo y lo narrativo, entre la observación minuciosa de la realidad y el desarrollo de una trama novelesca.

Y es especialmente en la segunda parte del libro, cuando de la mano del protagonista se nos traslada del valle pirenaico a Badajoz, donde la novela gana en consistencia a través de unos personajes caracterizados con profundidad y delimitados como individuos, personajes representativos de una sociedad abordada de modo crítico y con un espíritu regeneracionista.

Quizá se resiente la novela de falta de unidad, pero las descripciones de paisajes y ambientes y los retratos de personajes constituyen razones más que suficientes para recuperar una obra como esta y a un autor que merece mayor consideración, a lo que sin duda contribuirá esta edición hecha con rigor y seriedad por el profesor Manuel Simón Viola.
Santos Domínguez