10/10/08

Aprendiz de Homero


Nélida Piñon.
Aprendiz de Homero.
Traducción de Montserrat Mira.
Alfaguara. Madrid, 2008.


Hace años que converso con Homero. Fui educada para entenderlo. Unida al poeta por tradición y por coherencia civilizadora, nada en él me resulta ajeno.

Entre la agonía de lo femenino en Dulcinea y el artículo que cierra y titula el volumen, Alfaguara reúne veinticuatro ensayos de Nélida Piñon. Veinticuatro artículos de esta hija de Cervantes, nieta de Homero y hermana de escritores como Vargas Llosa o Carlos Fuentes.

Aprendiz de Homero es también una declaración de las señas de identidad de Nélida Piñon, un homenaje a los personajes y a los autores que forman parte de su mundo: Don Quijote y Ulises, Homero y Cervantes, Machado de Assis o Monteiro Lobato. Y, junto con un recorrido por la creación literaria de la mano de una lectora privilegiada, esta recopilación de ensayos breves es también un homenaje explícito a personajes femeninos como la Sara bíblica, a la que se dedica un texto memorable, la Artemisa mitológica, la Dulcinea quijotesca, la Úrsula Iguarán de Cien años de soledad o la Eulalia de su novela La república de los sueños.

La palabra y la memoria reivindicadas en unos artículos en los que la ironía se convierte a menudo en una de las variantes más refinadas de la inteligencia. En ellos, la narradora brasileña habla con pasión y lucidez de la literatura y los secretos de la narrativa o del enigma de la creación, declara sus influencias literarias y hace un recorrido por las lecturas que más huella han dejado en la vida y la obra de una autora que escribe de sí misma en La epopeya de la lectora Nélida, uno de los mejores textos del libro:

Nací escritora, nací lectora. Los rasgos y las idiosincrasias inherentes a ambos estados me acompañan siempre.


Santos Domínguez